Las Mejores Prácticas

Las mejores prácticas son las técnicas reconocidas para obtener mejores resultados o parámetros para asegurar la calidad de productos y servicios, los que se acreditan bajo estándares como ISO, ANSI o DIN. Son también una colección de guías o éticas que indican la manera más prudente o eficiente de hacer algo y así, reducir los riesgos.

¿De dónde vienen las mejores prácticas?

A las mejores practicas generalmente se llega, después de procesos de prueba y error que muestran la mejor manera de proceder. Por eso, encontrar las mejores prácticas implica tomarse el tiempo de investigar lo que quiere hacer y encontrar la mejor manera de hacerlo.

Todos los negocios se fortalecen con las mejores prácticas y establecerlas en su operación es la mejor manera de lograr que se realicen eficientemente.

La Evolución

Dado que hay factores que cambian, como nuevas tecnologías y comunicación, las mejores prácticas también deben revisarse para su ajuste y evolución. Ese es uno de los factores fundamentales de ellas: Las mejores prácticas, mejoran con el tiempo.

Ejemplos

Para mostrar con claridad, podemos usar el ejemplo de las comunicaciones escritas: la escritura siempre ha sido una manera eficiente de comunicarse, pero el medio ha cambiado y con el, la mejor práctica de escribir. Desde las cartas escritas a mano, pasando por las máquinas de escribir manuales y eléctricas, hasta la escritura electrónica de hoy. Si comparamos solo la velocidad del mensaje, podemos notar la evidente evolución de la mejor práctica para enviar un mensaje efectivamente.

Eso mismo lo podemos ver en medios de transporte, empaque de productos e incluso en la simple manera de hacer cálculos matemáticos. Negarse hoy a las buenas prácticas de usar una calculadora o un celular, no lleva sino a perder un tiempo valioso para los negocios de la actualidad.